La crisis sanitaria, social, económica y regulatoria pone de manifiesto la elevada incertidumbre con la que se despidió 2020, y que ha dado comienzo en 2021, en torno a la evolución del mercado inmobiliario. En este contexto incierto, los analistas esperan correcciones en los precios de los inmuebles residenciales en España, que podrían ir disminuyendo en la medida en que la economía se afiance, se vaya generando empleo y se retome la confianza. La adquisición de una vivienda tiene un gran impacto sobre la salud financiera de una familia y hay varios aspectos que pueden ayudar a tomar esta decisión tan trascendental.