"Es un jugador especial, de los mejores que he dirigido. Después de Leo Messi viene De Bruyne", afirmaba Pep Guardiola tras los primeros partidos al mando del Manchester City. El belga, que lejos de tener cifras espectaculares en el apartado goleador —suma dos—, es el faro del conjunto citizen.

"Después de Leo Messi viene De Bruyne"

Su visión de juego, técnica, llegada al área rival y juego entre líneas aportan un extra al ya de por sí excelso plantel que ostenta el City. Su ausencia de los terrenos de juego durante treinta días pone encima de la mesa el primer quebradero de cabeza para Guardiola.

Silva o Gündoğan, sus recambios

Lo positivo, dentro de la desgracia, es que Guardiola tiene sustitutos de garantías para esa posición. David Silva o İlkay Gündoğan, obligados en muchas ocasiones a jugar volcados en la banda, son las balas que tiene Pep para suplir la ausencia del belga en la visita a Glasgow.

Partido importante también para Claudio Bravo que jugará por segunda ocasión con la camiseta del City en la máxima competición europea de clubes. El chileno no encajó ningún tanto en el 4-0 de la primera jornada ante el Gladbach y quiere seguir por esa senda.

Segundo choque para el conjunto 'sky blue' en el grupo C de la Champions League ante un rival que cayó en la primera jornada por 7-0 en el Camp Nou. Pese a ello, este Celtic mejora bastante sus prestaciones cuando juega en su estadio. Un campo teñido de blanco y verde que recibe siempre a los suyos con el mítico 'You'll never walk alone'.

Rodgers, un amante del juego de toque

Un Celtic entrenador por Brendan Rodgers, de 43 años y admirar del estilo de juego de toque y posesión. "Cuando dominas la posesión tienes el 79% de probabilidades de ganar", afirmaba el natural de Carnlough, Irlanda del Norte, quien se declaraba abierto admirdor del Barcelona: "Soy un enamorado del fútbol español y en particular del Barcelona".

Juega con un habitual 4-2-3-1, aunque a veces cambia al 4-1-4-1 —como en el Camp Nou—, en un sistema en el que esa punta de lanza es la máxima estrella del equipo. Hablamos de Leigh Griffiths, un finalizador de 26 años que tiene enamorada a la afición del Celtic. El curso pasado acabó como máximo goleador de la Scottish Premier League con 28 tantos (4 de ellos de penalti), para un total de 40 partidos. Cifra que solo han conseguido ocho jugadores a lo largo de los 127 años de historia del club católico.

Cita exigente para un City que busca seguir la racha inmaculada en la presente temporada para mirar al horizonte con optimismo. A lo lejos llega el Barcelona, el 19 de octubre en la Ciudad Condal y el 1 de noviembre en Manchester. Dos duelos por el liderato del grupo. Eso sí, primero hay que sacar el premio gordo del Celtic Park.