En España se registraron más de 246.000 delitos digitales en el primer semestre de 2025, equivalentes a un delito por cada cien habitantes. Esta cifra, facilitada en el encuentro “Ciberseguridad: hackeando tu mente”, organizado por BBVA en colaboración con El País, da una idea lo extendido que están estas estafas de las que “todos podemos ser víctimas”. ¿Cómo protegerse? Evitar la multitarea, reconocer las emociones que acompañan una interacción inesperada, desconfiar de cualquier petición urgente y verificar siempre cualquier comunicación a través de canales oficiales son algunos de los consejos que los expertos asistentes compartieron en una sesión donde la ciberseguridad fue la protagonista.
En 2021, BBVA Perú fue el primer banco del país en implementar el uso del CVV dinámico, innovando en la manera en la que se resguarda la seguridad de las tarjetas de crédito y débito de los usuarios a nivel nacional. Pero, ¿qué es el CVV y por qué fue necesario dar el salto hacia su versión dinámica?
La inteligencia artificial no es buena ni mala por sí misma, sino que, al igual que sucede con cualquier herramienta, todo depende del uso que se haga de ella. De hecho, en el ámbito de la ciberseguridad tiene un doble papel: mientras los equipos de seguridad utilizan sus capacidades para reforzar las defensas, los ciberdelincuentes la emplean para mejorar sus ataques.
Imagen de cabecera generada con Midjourney (IA)
Cada vez más sofisticadas y difíciles de detectar, las estafas virtuales evolucionan al ritmo de la tecnología. Una de las más peligrosas consiste en suplantar la identidad de entidades bancarias mediante aplicaciones falsas que, al ser descargadas, instalan ‘malware’ en los dispositivos móviles de los usuarios. El objetivo: robar datos sensibles y tomar el control total del equipo.
Tanto identidad digital como huella digital son dos aspectos en los que se enmarca el conjunto de información existente sobre nosotros en el ciberespacio. Mantenerlas seguras es sinónimo de mantenernos seguros en Internet. Pero ¿en qué se diferencian ambos conceptos?
Abrir una cuenta bancaria con un 'selfie', verificar la identidad por voz o firmar operaciones con la huella dactilar. La biometría, que comenzó asociada a la criminología, se ha integrado en la vida cotidiana y se ha vuelto esencial para la verificación digital, especialmente en un contexto marcado por el auge de fraudes como los 'deepfakes'.
El estándar FIDO (Fast Identity Online) refuerza la seguridad de los sistemas de autentificación de la identidad ‘online’ en dispositivos móviles y aplicaciones web. Su objetivo es reemplazar el uso exclusivo de contraseñas por mecanismos de autenticación biométricos más seguros protegidos por sistemas de encriptación.
El 25% de las empresas con una estrategia de ciberseguridad madura reportaron 11 o más incidentes de este tipo en 2024, un 7% más que en 2023, según la encuesta global Future of Cyber de Deloitte. En la batalla por la seguridad de la información, las funciones 'hash' destacan como guardianas de los datos en primera línea. Desde la verificación de contraseñas hasta la firma electrónica, estos códigos son la base desde la que se construye el fortín de la seguridad.
BBVA da un paso adelante en la protección de sus sistemas y los datos de sus clientes con la puesta en marcha de su 'Cryptography Transformation Journey', un plan estratégico diseñado para garantizar la seguridad digital frente a los desafíos que plantea la computación cuántica. Con este movimiento, BBVA se posiciona como un referente en la industria financiera, anticipándose a una de las mayores amenazas tecnológicas del futuro.