Conocer los seguros, un llamado a la protección financiera
En el marco de la Semana Nacional de Educación Financiera (SNEF) 2025, celebrada en el Monumento a la Revolución, en la Ciudad de México, del 23 al 26 de octubre y virtualmente en la página de la SNEF 2025 hasta el 31 de diciembre 2025, Juan Pablo Elizondo Portilla, líder de proyectos de salud en Seguros BBVA México, en su ponencia “Qué pasaría si...?: La tranquilidad de saber que estás protegido" comentó la resistencia cultural que existe en México hacia la contratación de seguros y la importancia de estos para evitar afectaciones económicas importantes en caso de un siniestro.
                        La baja cobertura en cifras claras
Elizondo citó datos que proporcionan un panorama de la baja cobertura en México de los principales seguros. En el caso de los hogares, solo el 6.5% se encuentra asegurado, esto a pesar de la relativa recurrencia de eventos como temblores, huracanes e inundaciones. En materia de salud, solo ocho de cada 100 personas tienen contratado este seguro. Y en cuanto al aseguramiento de automóviles el porcentaje mejora aunque sigue siendo bajo ya que solo tres de cada 10 unidades tienen un seguro.
La reflexión del experto es que las personas no se aseguran, no porque ignoren los riesgos que existen, sino porque el sector de seguros no ha logrado comunicar con claridad qué es lo que realmente se vende, explicar todas las coberturas que considera un seguro y el beneficio de contar con estas protecciones en caso de un siniestro.
Tres conceptos básicos para entender un seguro
Existen tres conceptos que se encuentran en todos los seguros y que Elizondo señala se deben de conocer para entender adecuadamente su funcionamiento.
- Eventualidad ó riesgo: Es aquello de lo que la persona busca protegerse como un temblor, un accidente, una enfermedad, un robo o la pérdida de una maleta.
 - Persona o bien asegurado: Es la persona u objeto de valor que se quiere proteger, que puede ser un automóvil, una casa, la vida, la salud o incluso una mascota.
 - El pago o resarcir el daño: Es la cantidad de dinero que la aseguradora se compromete a pagar si el riesgo ocurre.
 
"los seguros son un vehículo que está diseñado para evitar un retroceso en la vida profesional y económica de una persona"
Conociendo mejor la cobertura de algunos seguros
Normalmente de un seguro se conoce la cobertura principal, por ejemplo, en un coche, el robo del vehículo o un choque, sin embargo, los seguros cubren un mayor número de riesgos. Elizondo explica algunos de ellos:
- Automóvil. La principal preocupación no es solo el golpe a la propia unidad, sino el impacto financiero de dañar otro vehículo. El seguro evita que el asegurado tenga que usar sus ahorros para reparar un vehículo ajeno o incluso cubrir gastos de su auto si el responsable no puede pagar. También la cobertura puede cubrir daños por caídas en baches, robo de objetos al interior del automóvil o ponchaduras de llantas.
 - Hogar. Más allá de la integridad del inmueble, actúa como un paraguas que puede cubrir desde el robo de interiores, daños a un celular, hasta gastos si una mascota muerde a un visitante. Incluso se pueden incluir servicios de asistencia para el hogar, como enviar a un experto para reparar fugas de agua o problemas en la lavadora.
 - Salud y Vida: Protege el bienestar de la persona y a sus seres queridos. En salud, protege además de enfermedades graves contra situaciones tempranas, como son accidentes o consultas médicas menores. En cuanto a seguros de vida las pólizas se adaptan a diferentes edades e incluyen coberturas como invalidez total y permanente o adelantos por primeros diagnósticos de enfermedades como el cáncer.
 
El principal mensaje que comparte Elizondo es que los seguros son un vehículo que está diseñado para evitar un retroceso en la vida profesional y económica de una persona al enfrentarse ante situaciones que pueden afectar de forma importante el patrimonio personal o familiar. El experto concluye su participación con una invitación a conocer los seguros y sus beneficios ya que, reflexiona, si las personas se preparan para tener éxito, es fundamental prepararse para enfrentar los posibles riesgos de fallas o accidentes y que esto no implique retroceder financieramente.