Cerrar panel

Cerrar panel

Cerrar panel

Cerrar panel

Análisis económico 12 nov 2025

El crédito bancario a las empresas repunta de modo generalizado entre sectores: BBVA México

De acuerdo con el estudio ‘Situación Banca’ elaborado por el área de Estudios Económicos de BBVA México, en el actual contexto de desaceleración de la actividad económica y del empleo formal que se ha visto influido por la incertidumbre sobre la política arancelaria de los EE.UU. y por los cambios institucionales domésticos, el financiamiento en México se ha distinguido por tres principales tendencias hacia el tercer trimestre de 2025.

La primera, el incremento de los recursos destinados a financiar a las empresas, lo que permitió que la desaceleración del crédito total fuera menor a la anticipada a inicios del año. La elevada incertidumbre sobre el nivel y el momento de la entrada en vigor de los aranceles en EE.UU. motivó un adelanto de compras con la finalidad de eludir, por algún tiempo, la medida. Esto se reflejó en un alza de 9.7% trimestral de las exportaciones mexicanas a EE.UU. durante los primeros tres meses del año, lo que a su vez impulsó la demanda de crédito en México.

De esta manera, el crédito a empresas creció a una tasa anual real de 11.2% al cierre de marzo, su mayor nivel desde junio de 2018, principalmente por el impulso adicional en el crecimiento de los sectores de manufactura y construcción y de las regiones norte y centro-norte, que agrupan el 78.0% del valor de las exportaciones totales.

Cartera Credito Vigente Empresas

El análisis realizado por BBVA Research México destaca que este mayor crecimiento del crédito a empresas se presentó a la par de una desaceleración del crédito al consumo y a la vivienda, explicada, en buena medida, por la menor creación de empleo formal y el poco dinamismo de la actividad económica. Entre diciembre de 2024 y septiembre de 2025 la tasa de crecimiento anual de los empleos registrados en el IMSS pasó de 1.0 a 0.4%, luego de registrar un crecimiento nulo en junio. Asimismo, de acuerdo con el INEGI, durante el tercer trimestre la economía creció -0.3% a tasa anual, derivado de un crecimiento promedio nulo a tasa anual del consumo privado y de -6.8% de la inversión entre enero y agosto de 2025.

Ante estos datos, entre diciembre de 2024 y septiembre de 2025 el crédito al consumo se desaceleró de 13.7 a 9.1% a tasa anual y sin considerar la inflación, con una menor dinámica, particularmente, en los segmentos de tarjetas de crédito y de créditos de nómina.

Credito Al Consumo Vigente

Por su parte, el crédito a la vivienda registró una desaceleración hacia niveles de 1.6% real anual en septiembre de 2025, su menor nivel desde diciembre de 2017, ante la prolongada caída del empleo formal que es una condición determinante para el desempeño de esta cartera.

De esta manera, el uso de los recursos financieros de la economía destinados al sector privado se incrementó ligeramente durante el primer y segundo trimestres del año, si bien se dio a partir de una recomposición de los recursos destinados a los hogares y a las empresas.

La segunda tendencia del financiamiento a lo largo del 2025 ha sido la dilución e incluso la reversión del efecto contable del tipo cambio sobre los saldos de las carteras de crédito y depósitos. La depreciación cambiaria desde niveles de 16.5 pesos por dólar (ppd), registrada desde junio del 2024, generó un efecto contable positivo para las carteras de crédito, particularmente a inicios del año en que el tipo de cambio se ubicó cerca de los 21.0 ppd.

En la medida que el dólar se ha debilitado de manera generalizada desde el mes de abril, el tipo de cambio ha descendido y en la comparación anual no solo se ha diluido el efecto favorable observado a principios del año, sino que ya para el tercer trimestre, este efecto contable ha impactado negativamente al crecimiento nominal de las carteras de crédito y recursos de la banca.

Finalmente, el informe señala que la tercera tendencia a lo largo del 2025 ha sido el fortalecimiento del ahorro para el retiro como la principal fuente de ahorro interno. Como resultado de la reforma al sistema de pensiones de 2020, las entradas netas de recursos a las SIEFORES se han incrementado más de 110% en promedio mensual en los últimos cinco años. Esto ha llevado a que los activos netos de las SIEFORES superen los ocho billones de pesos, alrededor del 21.0% del PIB, y representen el 20.0% de los activos financieros internos del país.

SaldoSiefores

La solidez de los recursos para el retiro ha permitido que la reducción del ahorro de no residentes, evidenciado por su menor apetito por bonos en moneda local, se haya dado de manera ordenada y sin sobresaltos en los precios o los niveles de liquidez del mercado de deuda. Asimismo, ha permitido, durante este 2025, atenuar los efectos de la reducción de otras fuentes monetarias como los depósitos a plazo, cuyo crecimiento se ha visto atenuado por la debilidad de la economía y la reducción de las tasas de interés.

En suma, el sistema financiero ha atravesado el complejo entorno económico apoyado en fuentes de financiamiento internas robustecidas por el ahorro para el retiro y dedicando una mayor cantidad de recursos financieros a las empresas. Cabe señalar que, aún con esta alza, el uso de recursos por parte de las empresas se mantiene rezagado respecto a lo observado antes de la pandemia y muy por debajo del uso de recursos del sector público, el cual se mantiene claramente como el principal usuario de los recursos financieros de la economía.

Hasta el momento, la intermediación bancaria ha mantenido una dinámica favorable, dada la magnitud de la desaceleración económica. No obstante, de mantenerse las condiciones de debilidad en el empleo y la actividad, no puede descartarse que la provisión de crédito a hogares y empresas pueda verse reducida adicionalmente.