Bancomer Talks celebra su segunda edición bajo el tema 'Creando oportunidades'

Uno de los ponentes invitados fue Andrés Lhima, un joven emprendedor que bajo el título 'Encontré mi vocación en la basura', habló de su experiencia y del reconocimiento que ha recibido en el ámbito del diseño internacional.

De sonrisa jovial y gran sentido del humor, hizo un recorrido muy divertido por el camino que ha seguido el diseño desde su adolescencia. En su afán por hacer lo que le gusta aprovechó cada una de las oportunidades que se le fueron presentando en el camino.

Una cosa lo llevaba a la otra; por ejemplo, haciendo una búsqueda en Internet se topó con importantes convocatorias de diseño internacional, en las cuales participó sin el afán de poner muy altas sus expectativas… y así comenzó el viaje.

“Toda mi vida he recogido basura de los contenedores, sin saber que ésta me llevaría a viajar –bromeó–, ya que cualquier cosa puede transformase y podemos hacer algo más con ella.”

La basura, comentó, fue su pasaporte para que su primera pieza (Sillón Fidencio realizado con relleno de botellas de PET y cubierto con bolsas de mercado) y  algunas otras  fueran a  parar en la tienda del Museo de Arte Moderno (MoMA) de  Nueva York, en el MoMA de Tokio y exhibido en museos como el de Artes y Diseño de Nueva York (MAD), La Corcoran Gallery of Art and Design en Washington, D.C. y en museos de México como MARCO en Monterrey; MACO en Oaxaca; y MUAC, Dolores Olmedo y Franz Mayer de la Ciudad de México. “Crean en ustedes, crean en sus sueños. Hay que ser disciplinados y no rendirnos”, concluyó.

Pamela Negritti, una joven de 23 años de edad, colaboradora de BBVA Bancomer, es licenciada en Comunicación con especialidad en Comunicación Organizacional por la Universidad Anáhuac. Negritti platicó sobre la reacción en cadena que tuvo su vida cuando se autocuestionó: "¿Cuándo decidiste que ya no te queda tiempo?".

Explicó cómo logró emprender a los 21 años con una pequeña “auto-tienda de abarrotes”. Siendo aún estudiante y buscando la manera de hacerse de los recursos para lograrlo, vio la oportunidad y el nicho y decidió que ese era el negocio que quería: “Ofrecer el servicio a todos los residentes del complejo de apartamentos en donde vivo. Primero mis papás no me tomaron en cuenta, pero cuando vieron que estaba aferrada y comprendieron que bastaba con que fuera mi idea y mi sueño, me apoyaron. Porque nadie puede entender, ni querer tu sueño; solo tú eres el que puedes cumplir y creer en tus propios sueños”.

Ser proveedor de familia no es cosa sencilla y no se trata de un tema de género. Uno de los pilares que sustentan el núcleo familiar es la responsabilidad y el amor cuando una pareja decide formar una familia y aquel “sí, acepto” forma parte fundamental de ella. Gabriela Ornelas es licenciada en Informática, egresada de la Unidad Profesional Interdisciplinaria de Ingeniería y Ciencias Sociales y Administrativas (UPIICSA), del Instituto Politécnico Nacional (IPN), y colaboradora desde hace 18 años de BBVA Bancomer. Mujer preparada, valiente y decidida, platicó al auditorio sobre '¿Cómo ser madre proveedora y no morir en el intento?'

Pero, ¿qué pasa cuando de pronto hay una crisis económica dentro del hogar? ¿Qué tanto trastoca la vida de cada miembro de la familia? ¿Cómo se logra salir adelante? Enfrentarse a esta realidad es mucho más común de lo que parece en todo el mundo, pero no todos quieren o se atreven a superarla. “Lo importante es enfrentarla, verle todos los lados y actuar, porque no es lo mismo el sueldo de uno que el sueldo de dos”, comentó Ornelas; y así fue cuando su familia se inició en el emprendimiento a través de un 'food-truck'.

El amor, la unión y el compromiso de pareja hicieron que esta familia, como tantas otras en todo el mundo, lograra salir adelante cambiando los roles tradicionales sobre quién debe llevar el sueldo a casa. “Mientras exista el compromiso de hacer cada quien lo que le corresponda en la nueva asignación de actividades, y por encima de todo, creando las oportunidades para ofrecerle a nuestras dos hijas lo mejor de mamá y de papá se sale adelante como familia”, concluyó.

El turno siguiente fue para otro de los invitados a este encuentro:  Manuel ('Eme') Morato, egresado del Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Monterrey (ITESM). Este joven innovador cree en el poder de la tecnología para resolver problemas en México y en el mundo. Ha trabajado en 'startups' tecnológicas en Silicon Valley, Corea del Sur y México en las áreas de negocios y estrategia. Actualmente es co-fundador y director del Dev.F. (primera escuela de 'hackers' de México y América Latina), trabaja en innovación cívica a través de Codeando México, es facilitador de Startup Experience , fue director en México de StartupBus, y ha impartido talleres de Lean Startup con el centro de emprendimiento del ITAM (EpicLab). Manuel compartió su experiencia sobre la cultura 'hacker' y cómo inició en este campo.

Dijo que lo que se busca a través de la escuela de Hackers, Dev.F es generar valor para el mundo. 'Eme' durante su ponencia, hizo una valiosa reflexión sobre esta otra cara de la cultura 'hacker': “Estamos llenos de problemas en nuestro país y en América Latina: hay que ayudarnos, y si usamos las habilidades tecnológicas para resolverlos se vuelve un placer”, dijo y aseguró que la tecnología nos da el poder de crear muchas cosas y soluciones a bajo costo.

Claudia Sosa es colaboradora de BBVA Bancomer y diseñadora industrial de profesión. Actualmente enfoca su experiencia en proyectos de diseño estratégico y de servicios. Gracias a una colección de experiencias profesionales en las industrias de comunicación, medio ambiente, manufactura, plásticos, finanzas y 'software', ha sido capaz de crear productos, sistemas y servicios innovadores que ofrecen un alto valor para el negocio, mientras se satisfacen óptimamente las necesidades de los usuarios, sacando el máximo potencial de la tecnología involucrada.

'¿Cómo hablar sin decir una palabra?' fue el tema que abordó. Hablar y expresarse sin decir una sola palabra es un arte y así lo demostró al comparar  el baile (en específico, el lindy hop) como una expresión corporal que conecta con la otra persona. “Lo mismo sucede con nuestros clientes, tenemos que conectarnos con ellos para saber qué necesitan y que quieren.”

Manuel Niembro fue el encargado de cerrar Bancomer Talks. Cuenta con un Máster en Dirección de Empresas para Ejecutivos con Experiencia (MEDEX), por el Instituto Panamericano de Alta Dirección de Empresas (IPADE) y dos diplomados en aplicaciones móviles y Responsabilidad social. Es una persona muy activa: Scout de pequeño, socorrista de un grupo de rescate, practicante del deporte extremo, guía de montaña, corredor de maratones y alpinista. Además, ha logrado una larga trayectoria de 24 años en BBVA Bancomer, desempeñando diversos cargos dentro de la institución.

A través de su experiencia de vida que Niembro tituló 'Aconcagua: el más exitoso de mis fracasos', hizo una analogía entre el alpinismo y la vida de las personas, tanto en el aspecto personal como en el profesional. En sus más de 25 años como alpinista ha acumulado múltiples experiencias; compartió, por ejemplo, lo complicado que es encarar primero a la montaña, no solo se trata de conocerla o estudiarla, sino de tener control sobre sí mismo y trabajar en equipo, en sincronía; saber escuchar, pero también decidir. La montaña es uno de los retos más grandes para todos los alpinistas y como en la vida. "Lo más difícil es mantenerte vivo, lo más difícil es crecer. Siempre hay que tener algo de miedo, siempre te tiene que impulsar algo”, afirmó.

Así concluyó el segundo Bancomer Talks 2017, que logró reunir a más de 250 personas en el auditorio de la Torre BBVA Bancomer en el emblemático Paseo de la Reforma, en la Ciudad de México. Los organizadores prometieron una tercera edición en breve.