Intraemprendedor: Ejemplos destacados de intraemprendimientos

El emprendimiento suele relacionarse con la puesta en marcha de compañías y organizaciones desde sus cimientos. Sin embargo, esta actividad también puede desarrollarse en el seno de empresas que ya existen para crear nuevos productos y servicios. Es lo que se conoce como intraemprendimiento, o emprendimiento interno. En este tipo de emprendimiento, son los propios trabajadores de una empresa, más allá de sus obligaciones contractuales, los que desarrollan innovaciones que puedan impactar positivamente en la compañía y mejorar su valor dentro del mercado.

Según un estudio de Deloitte, es más probable que una empresa reciba comentarios honestos para mejorar cuando sus trabajadores sienten que la compañía integra un alto grado de humanidad.

Algunas empresas ofrecen a sus empleados la posibilidad de destinar parte de su jornada laboral al desarrollo de nuevas iniciativas. Este es el caso, por ejemplo, de Google, que con su salida a Bolsa en 2004 reveló su política del 20% del tiempo: los profesionales pueden dedicar esa parte de su tiempo a explorar proyectos ajenos a su trabajo diario que puedan beneficiar a la empresa. Otras, en cambio, organizan concursos de ideas o 'hackatones' en los que los trabajadores se reúnen para trabajar en proyectos tecnológicos.

Gracias a estas acciones, dentro del mercado se pueden identificar varios ejemplos de intraemprendimiento que han dado lugar a productos exitosos.

Ejemplos de intraemprendimiento

Los intraemprendedores son personas capaces de detectar y promover nuevas ideas de negocio para su compañía. Para llevarlas a cabo, es imprescindible que cuenten con el apoyo de la organización y los líderes, que deberán colaborar con ellos en las estrategias y proporcionarles los recursos necesarios para desarrollar sus propuestas. Además, también deben darles seguridad y confianza, incluso cuando los proyectos no terminan de desarrollarse, para motivarles y fomentar el intraemprendimiento.

Algunos de los productos y servicios más populares del mercado proceden de la labor intraemprendedora de estos trabajadores. Empresas como Google (Alphabet), Sony o Facebook (Meta) se han beneficiado de la labor de sus intraemprendedores y han lanzado productos y servicios que han alcanzado la fama.

Gmail

El correo electrónico de Google debe parte de su éxito al intraemprendimiento. Esta funcionalidad es fruto del trabajo de un proyecto interno liderado por el programador Paul Buchheit. A él se le ordenó desarrollar un cliente de correo electrónico y comenzó a trabajar en el desarrollo de Gmail en 2001. Para materializar este nuevo buscador, este emprendedor decidió recuperar una antigua idea de crear un cliente 'webmail'. Para ello desarrolló un motor de búsqueda capaz de integrarse dentro del correo electrónico para distinguirlo de sus competidores.

Esta iniciativa, pese a despertar las dudas entre los trabajadores, fue aprobada por Larry Page y Sergey Brin, los fundadores de Google, e incluida dentro de las funcionalidades de Gmail. Además, para reforzar sus posibilidades, se decidió ampliar la capacidad de almacenamiento gratuita.

Lanzado al mercado en 2004, Gmail se presentó como un servicio más rápido e intuitivo que sus competidores. Este dio respuesta a una de las grandes demandas de los usuarios: un mayor espacio de almacenamiento. Ocho años después, Gmail logró adelantar a Hotmail, que hasta entonces había dominado el mercado.

Además de Gmail, otro ejemplo de intraemprendimiento exitoso desarrollado dentro de Google es el de la función de autocompletar, que fue ideada por el desarrollado Kevin Gibbs gracias a la política del 20% de la compañía.

PlayStation

Sony es otro de los gigantes que se ha beneficiado de la visión emprendedora de sus trabajadores. PlayStation nació de una idea de Ken Kutaragi, un ingeniero de la compañía que, tras desarrollar un chip de sonido para la Super Nintendo, propició un acuerdo de colaboración entre Sony y Nintendo para desarrollar una nueva Super Nintendo que incorporase CD.

En 1991, sin embargo, este acuerdo se rompería después de que Nintendo anunciase que se asociaría con Phillips, el entonces gran rival de Sony, para crear su consola. Ante esta situación, Sony, que ya había preparado cerca de 200 prototipos de la fallida videoconsola, barajó la posibilidad de colaborar con Sega, pero Kutaragi insistió en que trabajasen en la creación de su propio dispositivo. La ambición y pasión de Kutaragi convencieron al entonces CEO de la multinacional, Norio Ohga, que le dio luz verde para continuar con su proyecto.

En 1994, se lanzó al mercado PlayStation y Sony se adentró por la puerta grande en el mundo de los videojuegos. Desde entonces, la consola ha ido actualizándose, convirtiéndose en una referencia para el sector.

El botón 'me gusta' de Facebook

Que los usuarios de las redes sociales lancen los pulgares hacia arriba para indicar que un contenido les gusta también es un ejemplo de intraemprendimiento. Este botón nació en 2007 a raíz de una iniciativa liderada por Leah Pearlman, responsable de producto en Facebook, y cambió por completo el uso de esta plataforma. 

El botón 'me gusta' ofreció a los usuarios, que hasta entonces solo podían comentar las publicaciones, un nuevo método de interacción para expresar su afinidad a determinados post. Durante su desarrollo, se barajaron opciones distintas a la que finalmente se popularizaron: ideas como el símbolo de una estrella o de la suma estuvieron sobre la mesa.

Sin embargo, el diseño final se decidió en un 'hackathon', un encuentro entre programadores en el que, a través del trabajo colectivo, se busca desarrollar un nuevo proyecto. En este 'hackathon', un equipo conformado por los trabajadores Andrew Bosworth, Rebekah Cox, Ola Okelola, Rosenstein y Tom Whitnah crearon el primer 'me gusta' con forma de pulgar hacia arriba. 

Este diseño fue aprobado y en los años siguientes se fue mejorando hasta que, finalmente, se implementó en febrero de 2009 y fue replicado después por otras redes sociales y páginas web.

Otros ejemplos de intraemprendimiento

El lenguaje de programación Java, el servicio Amazon Prime Air, que utiliza drones para realizar las entregas a los usuarios, e incluso los famosos 'post-its' son otros ejemplos de intraemprendimiento que pueden encontrarse en el mercado.

Fomentar la creatividad y visión emprendedora de sus trabajadores puede ayudar a las compañías a desarrollar proyectos intraemprendedores, aunque hacerlo no sea su labor principal. Al fin y al cabo, los profesionales conocen desde dentro las necesidades de la compañía y el mercado y, con el suficiente apoyo, pueden ser los protagonistas de la innovación.