Banxico con clara tendencia a cumplir con las expectativas inflacionarias

Serrano destaca que el dato de la primera quincena de abril revela “que el proceso desinflacionario” sigue su curso, que la inflación general presenta una baja en comparación con la interanual registrando en este periodo un 6.2% desde el 7.1% que tuvo al cierre de marzo de este año, lo que confirma que el dato de septiembre de 2022 de 8.7% si “habría sido el pico de este ciclo inflacionario”. Por lo que el análisis de los datos observados por el INEGI, concluyen “que la inflación continuará con una tendencia a la baja”.

El economista explica que la forma en la que se valora el comportamiento inflacionario se puede centrar en el análisis de la inflación subyacente “que elimina los elementos de la  canasta de precios más volátiles como los bienes agropecuarios, energéticos y las tarifas gubernamentales” y que había tenido una tendencia resistente a la baja, razón por la que Banxico definió tener una postura monetaria más restrictiva. Sin embargo, actualmente esta inflación se encuentra disminuyendo, en marzo fue de 8.1% y en abril se ubicó en 7.7%. 

“La política monetaria en México ha alcanzado niveles muy restrictivos”

De acuerdo con Serrano la pandemia fue uno de los detonantes más relevantes de la elevada inflación por el choque que tuvieron los precios e impactaron a la subyacente por lo tanto se volvió un indicador poco confiable para analizar las tendencias futuras ya que los patrones de consumo de las familias tuvieron cambios por el periodo de cierres en las actividades comerciales y el aislamiento. Anticipa que la inflación sigue afectada por estos ajustes por lo que “es más útil  observar como medida de tendencia a la inflación mensual usando alguna técnica de suavización”, lo cual ha permitido observar una clara tendencia a la baja en la inflación mensual.

Otro de los impactos que habían generado preocupación y considerados determinantes en la alta inflación en los servicios además de los patrones de consumo, fueron las presiones en el mercado laboral. El economista jefe de BBVA México detalla que “al respecto, la primera quincena de abril también trajo la buena noticia de un descenso en la inflación de servicios que, si bien sigue elevada con una tasa interanual de 5.4%, es menor al 5.7% observado en marzo”.

De acuerdo con el Banco de México las expectativas de inflación estarán alrededor de 3.6%, un nivel similar al observado antes de que comenzara el proceso inflacionario.

Serrano señala que con los factores antes mencionados el proceso desinflacionario que está sucediendo en México seguirá durante los próximos meses y anticipa que la inflación podría cerrar el 2023 en niveles menores al 5% y afirma que principalmente será por cuatro razones. La primera es que los cuellos de botella globales en la demanda de mercancías se están resolviendo. La segunda, “las políticas monetarias y fiscales en países avanzados se han vuelto menos laxas”. La tercera razón es que los mercados de alimentos y energía han mostrado resiliencia ante la invasión en Ucrania y por último, “la política monetaria en México ha alcanzado niveles muy restrictivos”.

Ante este panorama que apunta a una mayor calma en el entorno inflacionario de México, Serrano concluye puntualizando que de acuerdo con el Banco de México las expectativas de inflación de mediano plazo están en alrededor de 3.6% “un nivel similar al observado antes de que comenzara el proceso inflacionario” por lo que las señales expuestas tanto por la gobernadora Victoria Rodríguez como el subgobernador Jonathan Heath, es acertada su postura que incluso le permitirá al banco central desligarse de la Fed.

Con lo cual el economista considera que "en los próximos meses Banxico debería comenzar a pensar en implementar un ciclo de bajadas" para lograr minimizar el efecto de la política monetaria en el crecimiento económico.

El artículo se publicó en El Financiero el 27 de abril de 2023 y puede consultarse en este link.