Guía práctica para internacionalizar una empresa

Paso 1: el comienzo

En primer lugar, debes reflexionar sobre los puntos fuertes y débiles de tu empresa. Para esto te vendrá muy bien emplear el Análisis DAFO (debilidades, amenazas, fortalezas y oportunidades). Identifica qué oportunidades puedes encontrar en el exterior para las que tu empresa se encuentra preparada (fortalezas-oportunidades), eso sí, no pierdas de vista las debilidades de tu negocio para no sucumbir ante las amenazas de los mercados (productos sustitutivos, nuevos competidores, etc…).

Debes tener claro el potencial exportador de tu empresa, para esto puedes usar una herramienta que pone a tu disposición el Instituto de Comercio Exterior (ICEX). Además, asegúrate de conocer el terreno sobre el que planeas caminar. Este mismo organismo te proporciona información acerca de trámites aduaneros, documentación, etc.

Paso 2: dando un empujón a las exportaciones

Como ya conoces las fortalezas de tu empresa, ahora es el momento de comprobar en qué lugares dichas fortalezas pueden generar oportunidades. El ICEX también proporciona información sobre ventanas de negocio en otros países en los que se demandan productos españoles. Además, obtendrás ayuda para promocionarte en la diversas ferias, jornadas, etc. que puedan interesarte.

Es fácil suponer que cuanta mayor información consigas, menor será la incertidumbre que deberás sufrir en tu aventura exterior. La Secretaría de Estado de Comercio, a través de su web, te proporciona información sobre aranceles, información aduanera, acuerdos comerciales y muchas otras cosas que conviene conocer antes de comenzar a exportar. Por otro lado, no es lo mismo exportar productos alimentarios que manufacturados, en esta misma web encontrarás los regímenes particulares de determinados artículos.

Paso 3: implantación en el exterior

Como todo empresario sabe, una de las primeras tareas a realizar antes de comenzar un negocio es el análisis de costes. También para esto el ICEX dispone de una herramienta que os ayudará a obtener una simulación de los costes de establecimiento en casi cualquier mercado.

El Instituto de Comercio Exterior también organiza los Foros de Inversiones y Cooperación Empresarial, Encuentros Empresariales y Misiones de Inversiones. De este modo, podréis contactar con potenciales socios y/o inversores del país en el que deseáis implantar vuestro negocio.

Paso 4: conseguir financiación

La financiación deberéis buscarla en función de la cuantía necesaria para lanzar vuestro proyecto. Si necesitáis un máximo de cinco millones de euros para financiar exportaciones, podéis solicitar la Línea ICO Exportaciones 2013. En ésta disponéis de dos opciones a la hora de fijar el tipo de interés:

• Operaciones con certificado de liquidez: Euribor a tres meses + 1’25% (máximo)
• Operaciones sin certificado de liquidez: Euribor a tres meses + 2% (máximo)

En el caso de que los que queráis financiar es una inversión productiva, la Línea ICO Internacional 2013 os facilitará hasta un máximo de 10 millones de euros. Aquí el tipo de interés dependerá del plazo, normalmente será el Euribor a seis meses más un diferencial más un margen que oscilará entre el 2% y el 2’3%.

Otra opción, aparte del ICO, es el Fondo para Operaciones de Inversión en el Exterior de la Pequeña y Mediana Empresa. Aquí podréis obtener financiación entre 75.000 y 10 millones de euros. Podréis financiar implantaciones en el exterior, adquisiciones, ampliaciones de empresas ya asentadas, etc.

Paso 5: conseguir asesoramiento

No todas las empresas pueden permitirse un asesoramiento de alto nivel, de modo que existen organismos que ofrecen asesoramiento gratuito a la hora de implantar tu empresa en el exterior. Uno de ellos es el Centro de Asesoramiento Unificado en Comercio Exterior (CAUCE). Aquí obtendréis asesoría en diversas áreas: tramites varios, estrategias, mercados, programas de apoyo, financiación internacional y arbitraje.

Como no podía ser de otra manera, el ICEX también ofrece servicios de asesoramiento. Aquí os informarán lo suficiente para que vuestro proyecto arranque con buen pie. Lo que sí es gratis, también, es la orientación para que vuestro proyecto consiga financiación pública y/o privada, como por ejemplo, a través del Programa PYME Invierte.

Vías de cobro y pago

Tanto cuando llegue el momento de que realicéis los pagos pertinentes, como cuando tengáis que recoger el fruto de vuestro esfuerzo, necesitaréis usar los medios de pago internacionales. A continuación os detallamos los más comunes ordenados, de más a menos, por la seguridad en el cobro que garantizan:

• Crédito documentario: cuando el banco emisior, a petición de su cliente,  obliga a realizar un pago a un tercero o a aceptar y pagar letras de cambio libradas por el beneficiario.
• Orden de pago documentaria: orden de pago que el ordenante solicita a su banco para que emita a favor del beneficiario de determinados documentos
• Remesa documentaria: consiste en el envío de documentos comerciales acompañados o no de documentos financieros (letra, pagaré, etc.).
• Transferencia internacional: mandato de pago que el propietario de una cuenta da a su banco para que envíe dinero a otra cuenta.
• Cheque bancario: mandato de pago emitido por un banco y que es pagadero tanto en la entidad que lo emite como en otra diferente.
• Cheque personal: mandato de pago del tenedor de una cuenta corriente contra la misma a favor de alguien.
• Orden de pago simple: orden de pago que el ordenante solicita a su banco que emita a favor de un tercero.
• Remesa simple: gestión de cobro del documento financiero a través del cual se ha instrumentado la deuda de la operación de compraventa o prestación de servicios.