Conceptos que se registran en el Buró de Crédito
Para muchos el Buró de Crédito resulta incómodo ya que, durante años, ha sido vinculado con el mito de tratarse de una ‘lista negra’ en la que se integran a las personas que no pagan o no han pagado algún tipo de préstamo. Pero muy pocos son los que realmente saben qué es, cómo funciona y, sobre todo, cómo evitar una calificación negativa de acuerdo a los conceptos que se toman en cuenta.
Uno de los principales objetivos de lo que se conoce como Buró de Crédito es proporcionar servicios de recopilación, manejo y entrega o envío de información del historial crediticio de las personas físicas y morales, con la finalidad de administrar el riesgo de los propios otorgantes de créditos como bancos o entidades financieras entre otros.
Esta sociedad califica el pago oportuno o extemporáneo, así como el estado actual de todos los créditos obtenidos, es decir, el número y el monto de las deudas adquiridas para que al final, las entidades financieras que dan préstamos usen los registros para evaluar y determinar (junto con otros factores como la edad e ingresos) si aprueban el crédito financiero o no.
Los conceptos que se registran son:
- Forma en que se han pagado los créditos, la puntualidad con la que se suelen realizar y si se tratan de pagos a tiempo o no.
- Número de veces en las que las entidades crediticias han requerido al contrayente del crédito por falta de pago.
- La conducta de pago que podría mostrar la persona en el futuro de acuerdo al comportamiento descrito.
Al estar en el Buró de Crédito se crea un historial crediticio y lo importante es mantenerlo con buenas referencias. En caso de no contar con un historial de crédito, una tarjeta de crédito puede ser una gran aliada para potenciar las finanzas personales siempre y cuando se use de una manera adecuada. De esta manera se empezará a crear un buen historial y se tendrá la oportunidad de poder acceder a créditos y financiamientos mayores.
En BBVA es posible solicitar una tarjeta de crédito desde la comodidad de un sillón y, lo mejor, sin largas y tediosas filas. Sólo es necesario contar con un ingreso mínimo de ocho mil pesos mensuales y estar al menos un año en el actual empleo. Así de sencillo es obtener un historial crediticio con BBVA.
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