BBVA reúne a más de 200 empresas españolas para abordar las consecuencias económicas del conflicto de Ucrania
BBVA ha organizado un encuentro de expertos, que siguieron más de 200 clientes empresariales, para tratar las consecuencias del conflicto entre Rusia y Ucrania en la economía global, europea y española, y los posibles escenarios a corto y medio plazo. El encuentro, moderado por el director de Empresas y Corporaciones de BBVA en España, Fernando Alonso, ha contado con la participación de la ex Ministra de Asuntos Exteriores, Ana Palacio, y el responsable de Análisis Económico de BBVA Research, Rafael Doménech. La previsión de no entrar en recesión económica o la importancia de seguir apostando por la transición energética con energías renovables para dejar atrás la dependencia energética y atraer inversión, han sido algunas de las conclusiones.
El conflicto de Ucrania ha planteado un nuevo escenario geopolítico y económico con algunas consecuencias ya tangibles, otras aún por determinar, pero también un momento de oportunidades asociadas a la sostenibilidad. En este contexto, y con el objetivo de acercar la visión de los expertos a los clientes empresariales, BBVA ha liderado el encuentro ‘El nuevo escenario geopolítico y económico mundial’.
A pesar del impacto del conflicto, que ha provocado que la previsión de crecimiento de BBVA Research con respecto a la eurozona haya descendido hasta el 2%, Rafael Doménech, responsable de Análisis Económico del servicio de estudios de BBVA, ha asegurado que no contemplan la posibilidad de que haya una recesión en su escenario base. “Los datos actuales invitan a un cierto optimismo”, ha afirmado Doménech, algo que se está viendo en la economía de España a través de los datos sobre la evolución del empleo, el gasto o las reservas turísticas.
El encarecimiento de las materias primas por el conflicto en Ucrania sí va a suponer para España un crecimiento menor, aunque la exposición del país a la economía de Rusia y de Ucrania es “bastante marginal en turismo, inversión extranjera directa o compra de residencias”, ha asegurado el economista. A nivel productivo, el mayor impacto para España se materializa por las importaciones de cereales y fertilizantes, que alcanzan el 12%; seguido del petróleo (10%) y el gas (4%).
La transición energética, clave para la inversión extranjera en España
La energía, que en la actualidad ha adquirido un papel de aún mayor relevancia por la necesidad de independencia energética de Rusia, es una oportunidad para continuar impulsando la transición ecológica. La apuesta de la Unión Europea por las energías limpias ha sido algo destacado durante el encuentro de BBVA por parte de Ana Palacio, la ex ministra de Asuntos Exteriores, quien ha señalado que “la transición energética hay que hacerla” y que “España fue una de las primeras en apostar por las renovables”. “Tenemos una capacidad y una industria potente de renovables”, ha afirmado Palacio, enfatizando también la apuesta por el hidrógeno.
En este sentido, Rafael Doménech ha asegurado que nuestro país tiene la oportunidad de ser una potencia en energías renovables no solo por la capacidad de producción (es el segundo país de la Unión Europea que más energía renovable genera), sino por el interés de los inversores extranjeros: “Hay empresas internacionales que quieren apostar por la energía renovable en España”, ha señalado responsable de Análisis Económico de BBVA Research. A esto hay que añadir la oportunidad que supone la llegada de los fondos europeos Next Generation para el impulso del proceso de descarbonización de la economía.
Por último, el director de Empresas y Corporaciones de BBVA en España, Fernando Alonso, remarcó “la gran oportunidad de desarrollo renovable en España basada en el actual foco empresarial por la sostenibilidad, en los ahorros en cuenta de resultados por eficiencia energética y en la vocación de avanzar hacia la independencia energética a nivel europeo”.