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Análisis económico Act. 27 sep 2018

Los efectos macroeconómicos de los impuestos al sistema bancario en España

BBVA Research ha analizado los efectos que la introducción de tres impuestos alternativos a la banca en España podría tener sobre las principales variables macroeconómicas. Así lo ha reflejado en un observatorio económico presentado hoy por Rafael Doménech, responsable de Análisis Macroeconómico en BBVA Research. En particular, se ha planteado un impuesto sobre los beneficios, préstamos y depósitos. En línea con la evidencia empírica disponible para otros países, los resultados de este estudio indican que este tipo de impuestos aumentan los tipos de interés de los préstamos y terminan afectando negativamente al volumen de préstamos y de depósitos, así como a la actividad económica agregada.

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El aumento de los impuestos al sector bancario ha sido objeto de un intenso debate desde que empezó la crisis financiera en 2007. En la medida que una parte de la crisis se ha identificado con la actividad bancaria, en los últimos años se han barajado diversos argumentos para justificar la conveniencia de introducir impuestos adicionales al sistema bancario. Sin entrar a valorar en qué medida una mayor imposición satisface o no esos argumentos, el observatorio económico de BBVA Research tiene como objetivo evaluar y cuantificar los efectos macroeconómicos de los impuestos adicionales sobre beneficios, depósitos y volumen de préstamos sobre la actividad económica.

El debate en España en los últimos meses se ha centrado en las consecuencias de la introducción de un impuesto extraordinario a la banca. Frente a los conocidos efectos distorsionadores de los impuestos sobre cantidades y precios, en función de las elasticidades de la oferta y de la demanda, se ha argumentado que sus efectos podrían ser nulos sobre el crédito y los tipos de interés si las entidades bancarias absorben íntegramente en sus márgenes los impuestos adicionales. Esta hipótesis contradice la justificación de impuestos pigouvianos para corregir externalidades negativas, y sería equivalente a argumentar que los tipos de interés de los bancos no responden a la política monetaria porque los cambios en los tipos de interés de intervención son absorbidos por los márgenes bancarios.

Antes de  cuantificar los efectos potenciales para la economía española, el observatorio realiza una detallada revisión de la evidencia empírica existente sobre los efectos de la introducción de impuestos extraordinarios a la banca en otros países. La evidencia internacional disponible apunta que, en general, los impuestos bancarios terminan aumentando los tipos de interés y reduciendo el volumen de crédito, alterando la estructura del balance bancario en función de las partidas que se ven gravadas y de las que no.

Para realizar una evaluación de los efectos potenciales de estos impuestos sobre el sistema bancario español, BBVA Research utiliza un modelo dinámico de equilibrio general especialmente diseñado, calibrado y estimado para la economía española. El modelo contiene un rico detalle de la estructura fiscal y considera un sector bancario caracterizado por una actividad mayorista, que gestiona el capital bancario y obtiene financiación del BCE y del resto del mundo, y por una actividad minorista que capta depósitos y concede préstamos a hogares y empresas, y al gobierno. Los tres tipos de impuestos analizados (sobre depósitos y préstamos, y un gravamen adicional sobre los beneficios bancarios) se diseñan para recaudar ex-ante un 0,1 por cien del PIB.

Los resultados de las simulaciones indican que los tres impuestos son equivalentes y que prevalecen sus efectos distorsionadores (que no son compensados por las mayores transferencias del sector público a los hogares), provocando una disminución del PIB, del consumo privado agregado y de la inversión. La necesidad de mantener la rentabilidad neta de impuestos sobre el capital en consonancia con el coste de uso de capital del conjunto de la economía, lleva a la banca a largo plazo a reducir su tamaño, con un menor volumen de capital bancario, créditos y depósitos, y a aumentar los tipos de interés de los préstamos. Este aumento de los tipos de interés es de unos 10 puntos básicos por cada décima del PIB de  aumento ex-ante de los ingresos públicos. Adicionalmente, como consecuencia de la disminución del 0,09 por ciento del PIB, los ingresos fiscales aumentan ex-post, pero en una magnitud inferior a la deseada ex-ante cuando se establecen estos impuestos.