Esto es lo que debes saber antes de comprar un coche eléctrico

Dependiendo del país de residencia, existen diferentes ayudas a nivel gubernamental que fomentan la adquisición de vehículos híbridos o eléctricos. En algunos casos, es posible conseguir hasta 6.500 euros para reducir la factura de compra de un modelo de estas características. Esto, sin duda, iguala mucho su precio con respecto a la oferta estándar de los automóviles de combustión interna. En la actualidad, ya se comercializan distintos modelos de coches eléctricos con diferentes prestaciones, características y niveles de autonomía según la inversión que se desee realizar.

Existen otros puntos a tener en cuenta antes de tomar la decisión de adquirir uno. Por ejemplo, si tenemos un punto de recarga próximo para el vehículo eléctrico. Hay que resaltar, que es posible colocar un punto de recarga en nuestro domicilio siempre teniendo en cuenta la gama de tipologías de conectores.

Dudas sobre los coches eléctricos

Además de conocer su precio, es importante analizar entre los diferentes modelos de coches eléctricos que escojamos su autonomía. De esta forma será posible saber si el vehículo cubrirá nuestras necesidades habituales de kilómetros diarios. Los últimos vehículos eléctricos que han salido al mercado permiten, si tienen su carga completa, realizar hasta 600 kilómetros. Tras 12 años de vida útil, la autonomía de un coche eléctrico que en un inicio alcanzaba los 600 kilómetros estaría en torno a los 430, lo que supone un 28% menos.

Para trayectos largos, es importante conocer los puntos de recarga que habrá por el camino y el tiempo que tardan en llenar la batería. Por otro lado, los conectores convencionales invierten alrededor de seis horas en completar su trabajo. Es importante saber esto para, por ejemplo, dejar recargando el coche durante la noche.

El mantenimiento es sensiblemente menor que en el caso de los coches de combustión interna, tanto en la diferencia de precio entre la gasolina y la electricidad como en las revisiones, ya que apenas supondrán un gasto cuestiones como los filtros, el lubricante o el aceite. En cuanto al ahorro en gasolina, una comparativa entre el consumo de un coche de gasolina y otro eléctrico que recorran 15.000 km anuales, se salda con un ahorro de al menos 700 euros a favor de la más sostenible.

Además, las compañías de automoción y el sector financiero ofrecen bastantes posibilidades para la compra del primer coche así como en la modalidad de ‘renting’ de vehículos eléctricos, lo que significa que abonando una cuota mensual podremos disfrutar del vehículo sin tener que llevar a cabo un desembolso inicial elevado. Por ejemplo, BBVA en España pone a tu disposición el Préstamo Coche Ecológico, el cual te permite obtener financiación para tu coche eléctrico o híbrido con condiciones ventajas. También una opción de autorenting para aquellos particulares que quieran un coche eléctrico o híbrido. En Colombia, BBVA financia coches o motos eléctricas a través del Préstamo Movilidad Sostenible.

Otro elemento importante es conocer cuál es la capacidad de la batería, que está íntimamente ligada a su consumo. Se mide en kilovatios-hora (kWh) y, cuanto más kWh tenga, mayor será la cantidad de energía que podrá almacenar. En la actualidad, los modelos que se comercializan oscilan entre los 35 kWh y los 100 kWh. El consumo se mide en kWh cada 100 kilómetros y supone un dato clave para conocer la eficiencia del vehículo así como, por supuesto, para saber si gastaremos menos dinero recorriendo una misma distancia.

El proceso de compra de un coche eléctrico

Además de la modalidad de ‘renting’ ya citada, en realidad, adquirir un coche eléctrico es exactamente igual que en el caso de los vehículos de combustión interna. Eso sí, es muy importante aquí consultar y conocer de antemano las ayudas económicas de las que podremos beneficiarnos y que suponen un alivio relevante para rebajar el precio final. En internet existen comparadores gratuitos que analizan la información de todos aquellos modelos que hayamos seleccionado previamente, indicándonos incluso su disponibilidad, además de datos tan útiles como los tipos de motores, la autonomía de cada vehículo o las prestaciones que incluyen.

Otra opción cada vez en mayor crecimiento es la de adquirir un automóvil eléctrico de segunda mano, gracias a que la comercialización de nuevos modelos de segunda generación con baterías de mayor capacidad está provocando que muchos conductores se deshagan de sus coches antiguos. Sin embargo, junto a comprobar el estado general del vehículo, es muy importante evaluar la situación de la batería, elemento clave para conocer la vida útil del coche. Al degradarse con el paso del tiempo, pierden capacidad energética y autonomía. Una buena solución para confirmar su estado es, por ejemplo, adquirir un kit que se conecta al puerto ODB del vehículo y que determina en el momento cuál es la situación real de la batería.