El ahorro energético son pequeñas decisiones que puedes realizar tú mismo. Aquí te proponemos algunas medidas sencillas que te ayudarán a lograr la eficiencia energética de tu hogar.
Consumo energético
Consumo energético
El precio del certificado energético de una vivienda o un local varía dependiendo del tipo de inmueble, de su situación geográfica y de otros factores. Pero a la hora de tramitarlo, ¿por qué encuentras cifras dispares para la misma construcción? La clave está en saber cuál es su objetivo y elegir bien el servicio técnico para gestionar este documento.
La potencia eléctrica es un parámetro que indica la cantidad de energía eléctrica transferida de una fuente generadora a un elemento consumidor por unidad de tiempo. En nuestro hogar determina la cantidad de aparatos eléctricos que podemos conectar a la red de manera simultánea. Calcular la potencia eléctrica que se necesita para un hogar o una empresa permitirá saber qué cantidad de energía es necesario contratar, lo que contribuirá a reducir la factura de la luz, o cuántos dispositivos pueden estar conectados a la vez.
El impacto que puede generar en el medioambiente la construcción o la reforma de un edificio ha promovido el impulso en todo el mundo de acreditaciones que califiquen su calidad y eficiencia energética. Gracias a ellos, es posible conocer lo que consumen y las emisiones de CO2 que emiten a la atmósfera, además de que la etiqueta energética permite a los propietarios promover un mejor uso de la energía y buscar fórmulas de ahorro que ayuden al planeta.
Impulsada por el Plan de Naciones Unidas para el medioambiente (PNUMA) y promovida por la Agencia Internacional de la Energía (IEA), la calificación de los aparatos electrodomésticos tiene como beneficio el ahorro energético y la reducción del impacto medioambiental durante el uso de estos dispositivos. Dependiendo del país, el contenido y la imagen de las etiquetas varía.
La eficiencia energética puede definirse como la optimización del consumo energético para alcanzar unos niveles determinados de confort y de servicio, por ejemplo, ajustando el consumo de electricidad a las necesidades reales de los usuarios o implementando mecanismos para ahorrar energía evitando pérdidas durante el proceso. En un país, disponer de un nivel adecuado de eficiencia energética permite, por ejemplo, aumentar la seguridad de que existirá un abastecimiento de energía suficiente para toda la población.
Saber el consumo que tienen los electrodomésticos de casa es clave para poder ahorrar en la factura de la luz. Sin embargo, muchos consumidores no conocen exactamente de qué elementos se compone dicho recibo. En este sentido, principalmente, cabe destacar dos principales: el número de kilovatios (kW) que tenemos contratados y la cantidad de kilovatios hora (kWh) que se han consumido en el hogar durante un periodo de tiempo determinado.
El coste de la energía eléctrica es muy importante para la economía doméstica, debido a que la electricidad es la única vía para que muchos aparatos y electrodomésticos funcionen en casa. Por ello, es importante tener presente que es posible abaratar la factura eléctrica poniendo en práctica algunas acciones que están al alcance de todos.
Las paredes, los techos, los suelos y las ventanas son la ‘piel’ de las viviendas y edificios. Elegir correctamente los cerramientos del hogar supone un ahorro económico y un menor impacto medioambiental. La mayor parte de la energía que se escapa lo hace por las ventanas. Si no están bien aisladas, se puede perder hasta un 30 % del calor.
Incrementar la eficiencia energética de los hoteles es imperativo para reducir las emisiones y contribuir a un turismo sostenible económica y ecológicamente. Los hoteles se enfrentan así al reto de optimizar su consumo energético sin perjudicar el servicio que ofrecen a sus clientes. ¿Cuáles son las principales fuentes de emisiones de CO2 dentro de la gestión y el mantenimiento de la actividad hotelera?
Uno de los recursos naturales más amenazados por el calentamiento global y además un recurso esencial para la supervivencia de todas las especies del planeta es el agua. Al mismo tiempo, este elemento es clave también para la propia actividad del sector turístico y un factor fundamental para su transformación hacia un modelo más sostenible en términos energéticos.
Actualmente, el certificado energético de una vivienda es obligatorio en España, por lo que es un requisito indispensable del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo para cualquier persona que quiera vender o alquilar una vivienda. Sin esa etiqueta, no puede salir al mercado inmobiliario. Al ser una medida que entró en vigor en junio de 2013, hay propietarios que todavía no han tenido que solicitarlo. Por ello, resulta de interés conocer los pasos para obtenerlo, su coste y otros datos útiles.
Eficiencia Energética
El cambio de hora en marzo y noviembre: ¿realmente sirve para ahorrar energía?
El presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, ha confirmado que el Ejecutivo comunitario propondrá que se deje de realizar el cambio de hora (de invierno y de verano) en la Unión Europea. Por tanto, se seguiría así el resultado de una encuesta que se realizó en los países comunitarios en la que el 80% votó que está a favor de no realizar este cambio.
Pero, ¿qué es la domótica? Sabemos que la domótica ayuda a que la vida en tu casa sea más cómoda, esté más automatizada, te ayude a ahorrar pero, ¿en qué consiste? “Un sistema domótico es capaz de recoger información proveniente de unos sensores o entradas, procesarla y emitir órdenes a unos actuadores o salidas. El sistema puede acceder a redes exteriores de comunicación o información”, explica la Asociación Española de Domótica e Inmótica CEDOM. El resultado es una vivienda en la que todo está programado e intercomunicado, estudiado para facilitar el confort
Cuando llega la factura de la luz o del gas, o cuando tenemos que llenar el depósito de combustible del coche, caemos en la cuenta de lo que nos cuesta la energía. Y es en ese momento, cuando pensamos que tenemos que hacer algo para ser más eficientes y ahorrar, pero muchas veces necesitamos algo que nos ayude.
En el manejo de las finanzas personales existen una serie de gastos a los que es imposible escapar, ya que están ligados a elementos imprescindibles en nuestra vida cotidiana. La factura energética es uno de ellos. Electricidad, agua, gas y gasolina son los elementos que componen el gasto energético habitual de una familia y que suponen un porcentaje importante de los gastos mensuales de un hogar. De hecho, una gestión eficiente de estos recursos puede suponer la diferencia entre las deudas o el ahorro.
Según el estudio realizado por IDAE y Eurostat, el 17% del consumo total de energía procede de los hogares, igual que el 25% del total del consumo de la electricidad. Además, el servicio más consumido es la calefacción, seguido de los electrodomésticos y otros aparatos hacen que nuestro gasto sea de 990 euros de media anual por vivienda.